Variaciones para educar adolescentes y jóvenes - Debora Kantor

Este libro ilumina pacientemente un terreno saturado y crecientemente inofensivo como es el que conforman las diatribas sobre los jóvenes, las culturas juveniles, el tiempo libre, la recreación, el deseo de inclusión, etc.

De entrada afirma que no es lo mismo un joven que un adolescente. No se le perdonan las mismas cosas. También de entrada se pone en entredicho esa imprudencia de llamar a un pedazo de nuestra estadía en el mundo la flor de la vida, divino tesoro o alguna otra expresión candidata a la risotada.

La autora usa el verbo diluir. Usa y abusa, porque ningún enunciado se salva de su máquina interrogadora insaciable. No solo se diluyen las responsabilidades, también se diluyen los argumentos de los irresponsables.